Hoy abordamos los datos relevantes a incluir en tu declaración de la renta y las posibles deducciones a aplicar. En este caso abordamos la situación familiar
1- Incluir de manera correcta la deducción por maternidad:
Esta deducción la aplican mujeres que estén dadas de alta en la Seguridad Social y tengan hijos menores de 3 años. El importe es de 100 euros al mes, lo que asciende a 1.200€ al año. Para cobrarla hay dos opciones, aplicarla en la declaración de la Renta o que la Seguridad Social adelante este importe. Que figure bien en nuestra declaración suele traer problemas. Pues resultan casos que se cobra doblemente (lo que suele acarrear penalizaciones de la Agencia Tributaria) o personas que no aplican esta bonificación.
2- Familias numerosas y discapacidad:
También debe incluirse en la Renta la percepción de ayudas por personas discapacitadas. Casos en los que se cumpla esta situación familiar, podrán deducir un importe que dependerá de de la situación y el tipo de familia numerosa, pero va de desde 1.200 a 2.400€. A lo que se deben sumar 600€ por cada hijo que forme parte de la unidad familiar y que exceda el tercer hijo en caso de categoría general y el quinto en categoría especial.
En cuanto a la forma de cobrar esta deducción sucede como en la que abordamos en el apartado anterior, puede cobrarse de manera anticipada (quedando reflejado debidamente en la declaración de la renta) o percibirlo al presentar su declaración.
3- Familias monoparentales:
Si la situación familiar es de unidad monoparental y se tienen dos o más hijos, podrá aplicarse esta deducción siempre que no se perciba pensión de alimentos.
4- Padres divorciados:
En caso de padres divorciados se puede incluir la pensión alimentaria si es que se abona alguna a favor de los hijos por decisión judicial.
5- Incluir a los hijos en la declaración.
Los hijos deben de figurar en la declaración de la renta, pero aún así hay una serie de circunstancias en función de la situación familiar. La principal restricción es que los hijos deben ser menores de 25 años y sus ingresos inferiores a 1.800€. Lo que siempre debe evitarse es que un hijo haga su declaración por su cuenta, y a la vez figure en la de sus padres. Lo más habitual es que sea más ventajoso que figure en la declaración de la renta de los padres.
Nuestros profesionales recuerdan la importancia de añadir todos estos datos para que el resultado de la declaración de la Renta sea lo más ventajosa posible. Os invitamos a contactar con nosotros a través del siguiente formulario:
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